Si en el post anterior “Cómo ser consciente de tu armario” se da un resumen del valor creador y del valor de consumo, ahora pasamos a informar sobre todo el pack que engloba la creación de una prenda de forma artesanal o en pequeña escala (con producción local).
Desde el punto 0 hasta que esa pieza está lista para el uso. Porque quizás ésto sea desconocido para algunos de vosotros y para conectar con el creador, se ha de conocer el proceso, en el cuál hay varias partes:
1- Proceso pre-producción
Este proceso abarca desde que el creador tiene la idea hasta que tiene todo lo necesario para poder darle forma a esa idea.
- Se parte de una idea que el creador necesita expresar. Cuento que necesita contar.
- Se explora el cómo dar forma a esa idea para que se convierta en una prenda.
- Se buscan métodos y materiales que puedan servir para dar vida a esa pieza: proceso de diseño.
No todos los materiales sirven para dar el efecto que se quiere en una pieza y no todas las formas son las adecuadas para expresar lo que se necesita ser expresado. (Si quieres hacer un bolso rígido tendrás que utilizar un material rígido, si quieres una falda vaporosa no dará ese efecto si usas un tejido tieso). - Una vez se tiene claro el cómo materializar esa idea, se realizan las muestras de diseño.
2- Proceso de producción
Este proceso parte una vez diseñada la pieza y escogidos los materiales hasta que la prenda queda realizada. (Aquí se puede contratar a talleres de confección/modistas particulares o si es en una escala muy pequeña, hacerlo el propio creador.)
- Con las muestras de los diseños, se realiza el patronaje y escalado (para disminuir o aumentar las tallas a partir de un patrón).
- Se corta el patrón en las telas. (Las telas las puede llevar el creador al taller de confección o el mismo taller las proporciona a elección del creador.)
- Se cosen las diferentes partes de una prenda hasta que se obtiene el resultado final. Se añaden las etiquetas interiores que van cosidas en la prenda.
- Se remachan los bordes de las costuras para que no se deshilachen y se realizan los acabados, como coser botones, ojales, añadir bolsillos, etc.
3- Proceso post-producción
Esta etapa es la que comienza cuando la prenda está hecha, hasta que es llevada a la venta.
- Proceso de planchado.
- Proceso de etiquetado (etiquetas externas, normalmente de papel)
- Envasado de las prendas y envío.
Este proceso es el más simple y directo. En procesos a grande escala, hay muchas más partes, por ejemplo, una vez acabada la pieza, el planchado lo suelen realizar en otra área. Entonces se necesita transporte del área de confección al área de planchado. A grande escala y sin producción local, ya sabemos de sobras las condiciones de trabajo en la que desempeñan sus tareas, y si a alguien le cabe duda, puede informarse más sobre este tema AQUÍ.
Pero de momento, este ejemplo de producción a pequeña escala es el que más conozco y sirve para lo que quiero tratar ahora: las diferentes categorías dentro de “moda respetuosa”.
Para aclarar estos asuntos, comparto una publicación escrita por Mireille Acquart (se dedica a la dirección y gestión de proyectos social y ambientalmente responsables y consultoría en moda ética y consumo responsable), publicada en la web “Ethical Fashion Space”.
MODA ECO, ÉTICA O SOSTENIBLE, ¿CUÁL ES EL NOMBRE CORRECTO?
El boom de lo verde, lo ecológico, orgánico y sostenible nos persigue desde hace un par de años, y seguramente una o dos veces has caído en la “tentación” de adquirir un producto con esta etiqueta, ya sea por elección o por moda, pero seguramente en algún momento te has preguntado si todas esas variantes precedentes a la palabra “moda” son sinónimos. Se refieren a lo mismo ¿no? ¿Se usan indistintamente? Aquí te explico.
⇒ Moda ecológica
⇒ Moda biológica/orgánica
⇒ Moda verde
⇒ Moda sustentable/sostenible
⇒ Moda lenta
⇒ Moda ética
Si bien todas las anteriores tienen en común el interés de fomentar la consciencia sobre el cuidado del medio ambiente y reducir los impactos que la producción de moda inflige sobre éste, no todas sustentan los otros 2 de los 3 pilares básicos de la Sustentabilidad: el ambiental, el económico y el social, que pueden extenderse hacia otros pilares complementarios como los aspectos culturales ligados al social o el de innovación y nuevas tecnologías, así como el político-organizacional que van muy de la mano del económico.
Y créeme, no te juzgo, es muy fácil dejarse llevar por la atracción que nos causa la bien empleada mercadotecnia o nuestra poca experiencia en el tema, y comprar todo lo que nos vendan con la promesa de que es verde, ecológico o sustentable, pero ¿realmente qué cosa es qué y cómo podemos diferenciar sus alcances? Te cuento de manera fácil, breve y sin rodeos:
La moda ecológica tiene como principio rector el respeto del entorno e infligir el menor impacto ambiental nocivo posible, más no se rige de manera formal ni abierta por el respeto de las condiciones laborales y el aumento de la calidad de vida para quienes figuran como mano de obra en esta industria.
Además, y así como la moda biológica/orgánica utilizan componentes que se obtuvieron por medio del cultivo ecológico: sin pesticidas, abonos químicos ni sustancias tóxicas.
Para le caso de la cosmética con este mismo nombre, no se admite el uso de conservadores, colorantes, perfumes sintéticos, siliconas ni aceites procedentes de la petroquímica durante el proceso de transformación y las pruebas en animales están prohibidas. La cosmética que se hace llamar natural, atentas(os), puede ser engañosa, ya que si bien utiliza activos naturales para crear sus productos (cacao, maracuyá, almendras, vainilla, algodón, y otros frutos), no quiere decir que no contenga conservadores o ingredientes químicos y sintéticos al igual que la cosmética convencional, sólo que lo hace en menores cantidades.
Ahora si, la moda sustentable o sostenible (recuerda que es cuestión de léxicos –sostener o sustentar– pero para efectos prácticos, ambos vocablos se refieren a lo mismo) a diferencia de las anteriores, busca no sólo respetar el entorno que nos rodea y provocar el mínimo impacto ambiental dañino posible, sino también pretende generar una nueva forma de pensar y vivir en paz con nosotros mismos, nuestra cultura, nuestra forma de organización social y colaborativa, al mismo tiempo que busca mantener un equilibrio con el medio ambiente, favoreciendo el desarrollo de una sana economía local y una sociedad justa e incluyente.
Dentro de esta categoría encontramos dos esquemas de moda:
La moda lenta o slow fashion y la moda ética o ethical fashion.
La moda lenta o slow es aquella que se une al movimiento SlowFood adoptando varias de las características de éste, en particular la lucha contra la estandarización y masificación, en este caso de la moda, como lo es la llamada fast fashion, en dónde la rapidez, atemporalidad y transitoriedad son elementos icónicos. Vemos aparecer y desaparecer “tendencias” y temporadas de los aparadores cada 2 o 3 semanas, colecciones que van y vienen en cuestión de días. Lo que la moda lenta busca es extender la vida de los productos a través de su valor productivo y así, darle tiempo a las colecciones para ser elegidas, para ser producidas y para ser usadas.
Por último pero no menos importante, el término moda ética surge entre 2004 y 2007, entendiéndose como la alternativa dentro del marco del desarrollo sustentable que concentra las tres dimensiones de la sustentabilidad y sus subyacentes, siempre con la importancia y el valor de la dinámica ética entre el ser humano y éste en su interacción con la naturaleza, por lo que, funde la importancia de la dimensión económica (política-organizacional), humana (social-cultural) y medioambiental durante todo el proceso productivo sin dejar de lado la estética, el glamour y placer, que tanto atrae y vuelve locos a muchos.
Así que, ¡watch out! empresas, diseñadores, retailers y consumidores, no deben perder de vista el qué, cómo y cuándo producir, comercializar y consumir Moda. El término podría ser lo de menos mientras el objetivo sea el mismo: un futuro sostenible para las generaciones que hoy –aún– tenemos el placer de disfrutar y aprovechar y, para las generaciones futuras.
Vale, queda definido las partes del proceso de realización de una pieza y las diferentes categorías en cuanto a moda respetuosa. Pero todavía no tengo claro cómo elegir las prendas, o dónde elegir prendas de este tipo, o veo confuso el tema de si algo puede ser 100% ecológico… es el momento de hacer una síntesis con toda la información y ver qué posibilidades reales puedo tomar a la hora de elegir un producto.
Para ello, voy a hacer una auto-cuestionario en el siguiente post, formulándome preguntas a mí misma y viendo hasta dónde puedo responder, para saber cómo elijo una forma de compra u otra. No te lo pierdas porque seguro que alguna de esas preguntas te la formulas tú también y te sirven para encontrar tus propias respuestas 🙂
¿Ya conocías las diferentes partes del proceso creativo y las diferentes categorías dentro de la moda respetuosa? ¿Te llama la atención el slow fashion o eres más de fast fashion? Cualquier opinión o idea puedes comentarla abajo.
Gracias 🙂
Me ha encantado este post! Ahora sé el significado de todos esos tipos de moda que escucho por ahí y que ni siquiera me había planteado. 😪Tengo curiosidad de leer tu auto cuestionario en tu próximo post 🤗🤗🤗🤗
Gracias Selene, me alegra que te sea útil!! Claro que si, ahora ya sabrás de qué van todos esos nombres 🙂 En dos semanas está publicado el auto-cuestionario 🙂